La increíble historia de Ann Elizabeth Hodges...

Llevo un tiempo aficionada a leer los natalicios del día para compensar los obituarios con los que nos impacta la prensa día a día. Hoy por ejemplo me produce una pereza máxima felicitar el cumple a Bárbara Rey, Shakira o Sal-Piqué. Por el contrario, me ha llamado la atención al dar un repaso al 2 de febrero en Wikipedia, que tal día como hoy de 1920 nació Ann Elizabeth Hodges. Esta mujer cuando contaba 34 años,el 30 de noviembre de 1954, estaba durmiendo plácidamente en el sofá de su casa de alquiler, cuando un trozo del meteorito Sylacauga, extraterrestre, del tamaño de un pomelo impactó en el techo, con la fatalidad que justo debajo estaba ella durmiendo y le ocasionó heridas en la cadera y secuelas psicológicas de por vida. Las secuelas psicológicas fueron más bien propiciadas, porque perdió la oportunidad de conseguir 5000 $ de la época que le ofrecieron diferentes medios de prensa por el trozo de meteorito. No pudo lucrarse en modo alguno porque fuerzas gubernamentales se presentaron en su casa en un helicóptero y se lo llevaron para analizarlo. Cuando finalmente se lo devolvieron, ya había pasado el interés mediático. Así que Ann Elizabeth harta de esta historia decidió donar el meteorito al Museo de Ciencias de la Universidad de Alabama. No era el afán de lucro lo que la guiaba sino el hecho de morar su casa como inquilina en alquiler y el dueño le reclamaba los daños y desperfectos ocasionados por el meteorito.Como vemos los conflictos entre propietarios e inquilinos no son de ahora. Esta historia daba para una segunda parte de "No mires hacia arriba". Aprovecho la ocasión para recordar a la clase política de todo sesgo ideológico que la vivienda en alquiler está imposible en las grandes ciudades y periferias. Que nos expliquen cómo con un SMI de 1080 euros se pueden pagar los 1000 que se piden de alquiler en demasiados lugares. 2023 es año de elecciones y se quitan las ganas de votar a nadie.